En el mundo de la programación, conviven diferentes metodologías que deben incluirse durante el ciclo de vida del desarrollo del software. En la actualidad, una de las prácticas más habituales o recomendadas por quienes trabajan en el ámbito de IT es el Test Driven Development.
Esta técnica ha ganado una gran relevancia en la industria en los últimos años. A medida que la creación de aplicaciones y programas cada vez más sofisticados y que requieren de mayor seguridad ha evolucionado, se volvió fundamental el papel de analistas QA, testers y más.
De hecho, realizar pruebas antes de que las soluciones tecnológicas salgan a producción -es decir, que puedan ser utilizadas por los usuarios reales- es fundamental para disipar dudas, resolver errores y mejorar aún más lo ofrecido.
¿Quieres saber más sobre este tema? Te lo contamos a continuación.
¿Qué es el Test Driven Development?
El Test Driven Development (TDD) es un enfoque de desarrollo de software que se basa en la creación de pruebas automatizadas antes de escribir el código real. En esencia, se trata de un ciclo repetitivo que consta de cuatro pasos: idear una prueba o test, escribir el código que hace que la prueba pase satisfactoriamente, validarlo y refactorizar si es necesario. Este ciclo se repite continuamente a medida que se lleva a cabo un nuevo producto o servicio.
También conocido como desarrollo guiado por pruebas, el objetivo de esta técnica es conseguir un código más robusto y una creación mucho más rápida.
Los beneficios del Test Driven Development
Optar por la verificación en los procesos de creación de software para que los errores sean los menos posibles es clave para lograr excelentes resultados. Después de todo, la competencia en el mundo IT es ardua y se necesitan de trabajos sofisticados para mantenerse siempre actualizados.
En tanto, el TDD ofrece una serie de ventajas que lo convierten en una metodología atractiva para quienes trabajan en tecnología. Veamos algunos de sus beneficios más importantes.
Mejora la calidad del código
Al escribir pruebas antes de implementar el código real, el desarrollador se ve obligado a pensar en los requisitos y el diseño de la funcionalidad. Esto conduce a un código más limpio y de mejor calidad, ya que se enfoca en satisfacer las necesidades reales del software.
Evita el código duplicado
Además, este enfoque elimina las posibilidades de duplicación para que el mismo proceso de desarrollo sea más fluido y exacto.
Facilita la detección temprana de errores
El TDD permite identificar problemas en una etapa previa al desarrollo. Esto facilita su corrección antes de que se conviertan en inconvenientes más graves y costosos.
Incrementa la confiabilidad del software
Las pruebas automatizadas garantizan que las funcionalidades existentes no se vean afectadas por futuras modificaciones. De esta manera, se contribuye a la estabilidad y confiabilidad del software a lo largo del tiempo.
Perfecciona la colaboración en equipos
Además, un enfoque TDD promueve la colaboración entre los miembros del equipo de desarrollo, ya que las pruebas y los requisitos son documentados de manera clara, a modo que todos puedan entenderlo. Gracias a esta cooperación, se promueve una mayor comunicación y trabajo conjunto.
Optimiza la documentación
Brinda una gran cantidad de información real y contextualizada que ayuda a resolver dudas.
Aporta escalabilidad a los proyectos
Otra de las ventajas significativas del Test Driven Development es que proporciona escalabilidad y permite hacer crecer el proyecto según se vaya trabajando.
¿Cuáles son las etapas del ciclo de Test Driven Development?
Para trabajar bajo el enfoque de TDD es necesario conocer cuáles son sus fases indispensables. A continuación, las detallamos.
1 – Desarrollo de la prueba: En esta etapa, el desarrollador escribe una prueba automatizada que describe el comportamiento que se espera del código que aún no ha sido implementado. La prueba inicialmente fallará, ya que el código aún no existe.
2 – Escritura del código: El siguiente paso es llevar a cabo la escritura del código mediante el cual se irán verificando las diferentes pruebas. Para esta instancia, el desarrollador escribe el código mínimo necesario para que la prueba pase satisfactoriamente. El objetivo es que la prueba pase, no necesariamente producir un código completo en esta etapa.
3 – Validación: Luego, llega el turno de comprobar si todo lo que hemos hecho anteriormente está correcto. Esto quiere decir que, si en la fase anterior hemos conseguido pasar todas las pruebas establecidas, el software ya es válido.
4 – Refactorización: Esta es la fase final del proceso. Durante esta etapa, el desarrollador mejora la estructura y la eficiencia del código, sin cambiar su comportamiento. La refactorización garantiza que el código sea limpio, legible y mantenga un alto estándar de calidad.
Todo proceso de TDD es riguroso, por eso es necesario que quienes lo lleven a cabo tengan conocimiento en el tema. Contar con equipos especializados en IT es clave para lograr buenos resultados. Sean tercerizados o internos, incluir talentos en tecnología en el desarrollo de software es una gran inversión para destacarse ante la competencia.
Cómo el TDD ayuda en el desarrollo de software
El Test Driven Development ofrece un enfoque sistemático para la creación de aplicaciones y programas que tiene un impacto significativo en la calidad y la eficiencia. Algunas de las formas las que este enfoque ayuda en el desarrollo de software incluyen:
1. Identificación temprana de problemas
Al escribir pruebas antes del código, los errores se detectan antes de que puedan arraigarse en el sistema. Esto ahorra tiempo y recursos al evitar correcciones costosas más adelante.
2. Fomento de la modularidad
El TDD promueve el desarrollo de módulos independientes y cohesivos. Esto hace que el código sea más fácil de mantener y permite la reutilización de componentes en otros proyectos.
3. Reducción de la complejidad
La división de un problema en pruebas y la implementación de código incrementalmente simplifica el desarrollo y facilita la comprensión de las partes individuales del sistema.
4. Mejora de la documentación
Las pruebas actúan como una documentación viva del software, lo que facilita la comprensión y el mantenimiento del código a lo largo del tiempo.
Desarrollo guiado por pruebas para aumentar la calidad del trabajo ofrecido
Como hemos visto, el Test Driven Development es una metodología esencial para mejorar la calidad de los productos y servicios al momento de su creación.
Desde Asap Consulting sabemos que detectar errores en etapas tempranas es fundamental para lograr una fluidez de trabajo y, por supuesto, reducir los costos que pueden ocasionar las fallas posteriores a la implementación, por eso contamos con AD Hoc Developments.
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